"[...] Y parezco tan feliz, nada como que hace mucho tiempo que me cuesta sonreír"

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Y tanto que me cuesta, cada vez que recuerdo que esta banda existe, se borra instantáneamente de mis labios todo intento de sonrisa, la mas tenue luz esperanzadora es rápidamente martilleada y rota en mil pedazos. Entonces siento la angustia mas terrible que uno pueda concebir y me tiro al duro y frío suelo para llorar desconsoladamente. Amaral no es una pesadilla, sino algo peor, Amaral existe en el plano de la realidad subjetiva, amaral existe de verdad y entre todas las desgracias intrínsecas a la propia vida, amaral puede convertirse en una de las peores, sobre todo si uno es, amante de la obra de arte musical por naturaleza propia.

Vamos, que si a uno le gusta la música, amaral es una gigantesca, dolorosa y persistente patada en los testículos.

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Solo queda una vela encendida en medio de la tarta, igual que solo queda una luz de esperanza en medio de mi corazón; que esta banda desaparezca de la faz de la tierra cuanto antes, y yo mismo estaría dispuesto a realizar cualquier requisito que los dioses me pidieran, a fin de terminar con este sufrimiento.

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Quiero sentir el universo sobre mí, que toda la masa de materia que existe en el cosmos aplaste mi pequeño cuerpo y me desintegre en el vacío, no me importaría que eso ocurriera si con ello me puedo librar de amaral.

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No creo en el dios judeocristiano ni en ningún dios de ninguna de las religiones, pero nunca se sabe, quizá un viejo gigante invisible leedor de pensamientos está allí arriba con una expresión sádica, esperando a que muramos para empezar a torturarnos por herejía...

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Nunca se sabe, como ya he dicho, así que en ese caso le declaro aquí mi rendición incondicional, mi total subordinación ante el, me arrodillo y le suplico que perdone mis pecados, le declaro mi temor hacia él y mi intención de vivir en la más estricta santidad.

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Dios de los cielos, perdona oh, mis pecados, libra mi espíritu pecador de la dominación del mal.

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Pero por favor , señor de los cielos, dios todopoderoso, oh señor, dios omnipotente, concédeme un solo milagro a mí, tu siervo que cree en tí y te ama y te teme; Haz desaparecer Amaral y borra su recuerdo de la faz del planeta.

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TE LO SUPLICO!!

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Esto que acabo de escribir es evidentemente una queja, un lloriqueo, un pataleo...

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Las razones por las que amaral debería desaparecer para siempre de la escena musical vendrán en el siguiente artículo, aunque sé y estoy seguro de que toda persona inteligente, con un mínimo de criterio y sentido común, no necesitará que le expliquen dichas razones y estará de acuerdo conmigo en todo lo que he dicho.

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Así que, Continuará....